Según un nuevo estudio, las algas comunes que se cultivan para la alimentación de peces, podrían convertirse también en combustible para aviones a reacción y biodiésel (biogasóleo).
Greg O’Neil, de la Universidad del Oeste de Washington, y Chris Reddy, del Instituto Oceanográfico de Woods Hole (WHOI) en Massachusetts, autores de esta investigación, utilizaron sustancias químicas sin explorar de las algas para poder sintetizar dos combustibles diferentes a partir de una sola alga.
La especie que utilizó el equipo estadounidense fue la ‘Isochrysis’ por su fácil cultivo y porque produce las grasas conocidas como alquenonas.
Los investigadores creen que estas algas tienen potencial para crear combustibles por los compuestos que tienen formados por cadenas de 37 a 39 átomos de carbono.
A pesar de ello, tuvieron que aplicar un proceso especial para acortar dichas cadenas y dejarlas entre 8 y 13 átomos de carbono, al ser conscientes de que las alquenonas son muy grades para convertirlas en combustible por sí solas.
Uno de los principales usos de este biocombustible sería el uso industrial, algo que permitiría revolucionar el sector y avanzar en sostenibilidad.
Fuente: mindalia.com
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